Manifestamos nuestra aflicción por la muerte de la mujer y lideresa ANA ANGÉLICA BELLO, representante ante el Comité Ejecutivo del SNARIV y miembro del espacio transitorio de participación, quien en vida defendió los derechos humanos de las víctimas, en especial, los derechos de las mujeres.
También expresamos nuestra solidaridad con los familiares y amigos de Angélica, con las organizaciones de mujeres y con las victimas en general.
Nuestra indignación por la insuficiente e inoportuna repuesta en la implementación de las políticas públicas derivadas de las leyes que consagran, aunque sea parcialmente los derechos de las victimas, entre otras a la rehabilitación y de manera particular con las deficiencias en la atención psicosocial, nos llevan a proponer una evaluación juiciosa de la situación de la implementación de la ley 1448 y desarrollar una estrategia de choque que permita abordar con agilidad y eficiencia los múltiples retos y debilidades que la implementación demuestra.
Esta evaluación deberá iniciar con una reflexión y definición de medidas inmediatas para la vulnerabilidad acentuada de las victimas mujeres y de sus lideresas.
Esta reflexión y decisiones deberán contar con la participación de las Unidades (Atención y Restitución), la Defensoría del Pueblo, la Fiscalía General de la Nación, la Comisión Congresional de Seguimiento a la ley 1448, el Programa Presidencial de DD.HH, el ICBF, el Ministerio del Interior, el Ministerio de Salud, la Unidad de Protección, la Procuraduría, por el Estado y las Organizaciones de Mujeres, y el Comité de Gestión y Trabajo del Mecanismo Transitorio de Participación por la sociedad civil.
Deberá igualmente convocarse de manera urgente el Comité Ejecutivo del Sistema al cual estaba delegada Ana Angélica (QPD).