Aunque nos hayamos acostumbrado, o creamos que no nos toca directamente, en Colombia la guerra sigue arrancando de sus hogares hijos, hijas, padres, madres, hermanas y hermanos del campo y la ciudad. Más de 450.000 hombres y mujeres pasan sus vidas lejos de su familia, mueren y matan todos los días perpetuando una cadena de odio que no ha dejado más que dolor y desesperanza, sin dar solución a problemas estructurales como la pobreza, la injusticia y la desigualdad social.
Bajo el ruido de las bombas y las balas es imposible escuchar. Es hora de parar la guerra para hablar de paz.
Este miércoles 13 de junio en la Plaza de Bolívar de Bogotá, a las 10:30 de la mañana, más de 30 organizaciones de la sociedad civil reclamarán el derecho constitucional que le asiste a todo colombiano de buscar, construir y disfrutar la paz. Nuestra Constitución Nacional en su Artículo 22 así lo declara: “La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento”.