
Equipo de la UTT de COCOCAUCA
El día 4 de febrero de 2023 186.000 personas cumplen 8 días sin fluido eléctrico en la costa pacífica de Cauca y Norte de Nariño, correspondiente a 9 municipios. En el departamento de Cauca los municipios son Guapi, Timbiquí y López de Micay; y por el departamento de Nariño se tiene los municipios de Olaya Herrera, La Tola, Iscuandé, El Charco, Mosquera y Francisco Pizarro.
La administración de la interconexión eléctrica de los 9 municipios de la costa pacífica, fue entregada a la empresa Centrales Eléctricas de Nariño S.A.E.S.P. – CEDENAR, desde marzo de 2017, por parte del Gobierno nacional de Juan Manuel Santos.
Para la población de estos municipios, es inexplicable que antes de 2016 funcionaban las plantas eléctricas municipales, que tenía las fallas rutinarias, hacían las reparaciones por sector y por ende había corte del fluido eléctrico en pequeñas áreas o franjas urbanas de los 9 municipios, pero jamás apagones totales del área urbana y por más de 2 días, específico para ese municipio.
Una vez los municipios entran al sistema de interconexión eléctrica, se debieron prever las posibles fallas en la transmisión del servicio eléctrico, implica que la empresa CEDENAR creada hace 67 años (el 9 de agosto de 1955) debía tener un plan de contingencias, partiendo por mantener los parques automotor de energía que estaba en cada uno de los municipios. Pero hicieron todo lo contrario, se llevaron las plantas de energía eléctrica instaladas en cada uno de los municipios, y ante cualquier falla, toda la región quedó a merced de las circunstancias.
Desde que se interconectó esta región, han sido múltiples los apagones, para citar solo el año 2022, hubo 19 apagones, desde la mínima de 12 minutos, en otros de 5 horas y también 3 días en el municipio de López y Timbiquí, conforme a las cifras internas de las que tiene documentada COCOCAUCA.
En el año 2023, inició con el apagón el 3 de enero a las 7:00 pm, y en lo corrido del año iban 3 apagones en las fechas de 3, 10 y 19 de enero de 2023, hasta que se presentó la del 28 de enero de 2023 desde las 8:42am y que seguimos padeciendo todavía.
En esta región históricamente marginalizada, donde más del 80% de la población es de etnia negra, en su mayoría la gente no cuenta con una pequeña planta eléctrica que pueda suplir de forma momentánea el fluido del servicio eléctrico, lo que conlleva al rompimiento de la cadena de frio y por ende la conservación de los alimentos, daños de los electrodomésticos por falta de uso. El riesgo es enorme ya que muchas personas no pueden llevar a sus pacientes o al niño al hospital en horas de la noche, de igual hay permanente contaminación auditiva de día y noche por el ruido que le generan las plantas de los pocos vecinos que tiene este aparato, se encarece los alimentos ya que el comercio se ve en la necesidad de usar combustible para las plantas eléctricas, y algunos dejan de comer para comprar el preciado líquido, porque hay que alumbrar al adulto mayor que está enfermo en casa.
Algunos comerciantes de la localidad de Guapi le contaron a COCOCAUCA que “Se calculan 6 galones de gasolina diarios que equivale a $72.000, se requiere comprar hielo para mejorar la refrigeración el cual ya no se consigue”, además dicen que “antes se vendían $2.000,000 (dos millones de pesos diarios), ahora solo $800.000 (ochocientos mil pesos), lo que arroja una pérdida de $1.200.000 (un millón doscientos mil pesos) diarios”, para un total de $9.600.000 por comerciante a la fecha, e incluso otros calculan hasta un 40% de perdidas respecto a lo que ganan, pero también informaron que “se venda o no, toca pagarle al trabajador auxiliar, se daña la carne y las verduras, y de repeso no se puede hacer el pedido desde Buenaventura hasta el regreso de la energía. (se protege la identidad por medida de protección).
Por su parte los vendedores de las tiendas de barrio manifiestan que “Yo me vendía diario $700.000 (setecientos mil pesos) y ahora solo $200.000 (doscientos mil pesos), lo cual equivale al 70 % de pérdidas diarias, y continúan diciendo que de repeso le toca seguir pagando el arriendo mensual por valor de $600.000 (seiscientos mil pesos) más los servicios públicos por $400.000 (cuatrocientos mil pesos).
A los vendedores informales de la galería tradicional, les está tocando trabajar también a perdidas, ya que invierten para la pesca, pero solamente para comer y no para vender, ya la gente se abstiene de comprar ciertas cantidades por falta de refrigeración.
Valoramos el esfuerzo de los operarios que hacen todo lo que esté a su alcance, en un compromiso con su pueblo para reparar la torre eléctrica fracturada y se tenga el restablecimiento del servicio eléctrico de energía. Pero para nuestra gente es inconcebible seguir este sufrimiento por falta de un plan de contingencias.

Para la regional Cococauca como una de las voces de la región en la costa pacífica del departamento del Cauca, que aboga por los derechos de la población étnico territorial, económica, cultural, social, ambiental y política, exige claridad y la presentación del plan de contingencias antes las posibles calamidades que venga en el futuro, ya que cada vez se hace más necesario y urgente.